lunes, 2 de enero de 2012

El magnate y el clítoris


A mí, el Ciudadano Kane, que está en varias listas como la mejor película de todos los tiempos, me aburre. No me extraña que haya sido un fracaso comercial. Coincido con las críticas negativas que la película ha recibido según el breve resúmen de ellas en la entrada de la wikipedia (en inglés) de este clásico: El Ciudadano Kane será un prodigio formal pero no emociona al espectador, aburre, representa un triunfo del estilo sobre la substancia, etc. Recuerdo que la primera vez que la vi me decepcionó mucho que al final "Rosebud", la última palabra de Kane, fuera el nombre de un trineo. Para quienes no la han visto, la película puede resumirse como la investigación de un reportero acerca del significado de la última palabra de un magnate de los medios: Rosebud, o sea capullo de rosa. Según la misma wikipedia, al parecer Rosebud era el nombre que William Randolph Hearst, el magnate de los medios de la vida real que sirvió de inspiración, entre otros, para la historia, le puso al clítoris de su amante Marion Davies. Creo que ese detalle ayuda a explicar que es lo que falla en la película. Al personaje Charles Foster Kane lo acusan los otros personajes de sólo quererse a si mismo, de no interesarse por nada ni nadie más. Alguno dice que lo único que Kane buscó toda su vida fue el amor. Pero el Ciudadano Kane no tenía corazón y lo mismo le pasa a la película. Que diferente sería si Rosebud fuera una mujer, o su clítoris, un amor secreto de Charly Kane. ¿Un trineo qué? Claro, es un símbolo de su infancia. ¿Pero entonces al final resulta que todo lo que el magnate quería era a su mamá? Al igual que Kane el personaje, que trata de llenar su vacío comprando obras de arte, que según le reclama su última mujer, a veces ni siquiera saca de la caja, la película del Ciudadano Kane cubre con maravillosas tomas un centro vacío. Capullo de rosa es un gran nombre para un clítoris, y uno ridículo para un trineo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario